El Programa Conjunto de Seguridad Humana entre Panamá y Costa Rica se encuentra mejoró las condiciones de vida de la población Ngöbe y Buglé en la “Ruta del Café” a través del desarrollo de políticas públicas de protección integral de la población migrante Ngöbe y Buglé en las comunidades de origen, tránsito y destino.
El Programa en su último año de ejecución alcanzó alrededor de unas 10,000 personas que transitan de la Comarca Ngäbe Buglé a Río Sereno en la Provincia de Chiriqui en Panamá y en Costa Rica en la comunidad de Coto Brus y Los Santos, llamada también “Ruta del Café”. Actualmente se está trabajando de manera particular con 160 familias de las comunidades de Kankintú y Muna, comunidades que migran a la cosecha de café.
El proyecto cuenta con un enfoque integral incluyó por primera vez actividades para promover el acceso a la justicia y el cuidado de la primera infancia para los Ngäbe y Buglé y se centró en la mejora del acceso a los derechos, servicios públicos e información.
La audiencia priorizada en el programa han sido adolescentes, jóvenes y mujeres enfatizando en la prevención de la violencia de género, ITS y VIH, embarazos en adolescentes y en la provisión de cuidados obstétricos de emergencia a mujeres embarazadas. En el desarrollo del Programa participan en Panamá las siguientes instituciones: Ministerio de Salud, Ministerio de Desarrollo Agropecuario, Migración. Desde Costa Rica se encuentra el Patronato de la Infancia, Ministerio de Trabajo, Migración, Ministerio de Salud, la Caja del seguro social, OIM y UNFPA con sus oficinas en Panamá y Costa Rica, entre otras. En el Programa participaron Agencias de Naciones Unidas como la Organización Internacional de las Migraciones (OIM), el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Este programa se encuentra fortaleciendo las capacidades de los y las Ngöbe y Buglé para llevar a cabo esquemas de producción sostenibles en los cultivos, desarrollando las capacidades de las redes comunitarias locales e intersectoriales, que incluyen a la población migrante, con el fin de promover y proteger su propia seguridad humana; aumentando las capacidades de las instituciones públicas de desarrollar políticas públicas dirigidas a la prestación de servicios adecuados y culturalmente sensibles en salud, protección de los derechos laborales y servicios para la primera infancia Ngöbe y Buglé a lo largo de su ruta migratoria; y empoderando a la población migrante para que ejerza y reclame sus derechos y evite riesgos para su salud y la violencia de género.
Como acciones de cierre se están finalizando los planes locales de los gobiernos locales en seguimiento a las acciones en los territorios, así mismo se encuentra la coordinación de las y los multiplicadores comunitarios que facilitaran la traducción con la población en la Ruta y la capacitación final a promotores de los derechos reproductivos de las y los migrantes.
